Investigadoras del IDIAPJGol estudian el riesgo de sufrir eventos trombóticos tras la infección y la vacunación contra la COVID-19
El estudio incluye datos de 2,6 millones de personas vacunadas, 174.000 casos de COVID-19 y 4,5 millones de personas de la población general.
Un nuevo estudio del IDIAPJGol compara las tasas de incidencia de eventos trombóticos después de la vacunación con Pfizer y AstraZeneca y después de la infección por COVID-19 con las tasas observadas entre la población general antes de la pandemia de COVID-19 mediante datos procedentes de la histórica clínica electrónica de Atención Primaria de Catalunya.
Eventos de tromboembolismo venoso y arterial
En los primeros 21 días después de una primera dosis de Pfizer, se observó un número ligeramente mayor del esperado en los casos de tromboembolismo venoso (TV, un compuesto de embolia pulmonar y trombosis venosa profunda). Concretamente, se observaron 313 casos (frente a 264 esperados). Los casos de TV después de una segunda dosis de Pfizer y después de la primera dosis de AstraZeneca fueron inferiores o iguales a lo esperado. En cambio, en las personas infectadas con COVID-19, las tasas de TV fueron 10 veces más altas de lo esperado (630 casos observados frente a 61 esperados).
Las tasas de tromboembolismo arterial (TA, un compuesto de infarto de miocardio e ictus isquémico) después de la vacunación fueron similares a las tasas esperadas para ambas vacunas. Por el contrario, en las personas con COVID-19 las tasas de TA fueron 10 veces más altas de lo esperado (683 casos observados frente a 165 esperados).
Trombocitopenia
Tras la primera y segunda dosis de Pfizer y la primera dosis de AstraZeneca se observaron entre 1.3 y 1.5 más casos de trombocitopenia de lo esperado. En cambio, entre las personas con COVID-19, se observaron 5 veces más casos de trombocitopenia de lo esperado (2.476 casos frente a 560 esperados). Además, las personas con COVID-19 tuvieron 12 veces más casos de TV con trombocitopenia y 5 veces más casos de TA con trombocitopenia de lo esperado.
Elena Roel, una de las principales investigadoras del estudio, concluye que “los resultados muestran que las vacunas contra la COVID-19 tienen un perfil de seguridad similar. En cambio, las tasas de eventos trombóticos fueron muy superiores a lo esperado en las personas con COVID-19”. Por tanto, “este estudio refuerza la importancia de la vacunación contra la COVID-19 como herramienta primordial en la prevención de los efectos adversos de la enfermedad de la COVID-19,” destaca la Talita Duarte-Salles, una de las coordinadoras de la estudio.
Referencia al artículo:
Thrombosis and thrombocytopenia after vaccination against and infection with SARS-CoV-2 in Catalonia, SpainEdward Burn, Elena Roel, Andrea Pistillo, Sergio Fernández-Bertolín, Maria Aragón, Berta Raventós, Carlen Reyes, Katia Verhamme, Peter Rijnbeek, Xintong Li, Victoria Y. Strauss, Daniel Prieto-Alhambra & Talita Duarte-Salles.